Monseñor habló mucho del
Vaticano IIB que vive la FSSPX. Mencionó que Monseñor Fellay ya no es capaz de
decir la Verdad. Según él, la única manera de salvar a la FSSPX sería cambiar a
todos sus dirigentes, lo que sería un milagro. Alentó a los fieles a crear
capillas para no contaminarse por la apostasía lenta y el liberalismo que ha
entrado en la obra de Monseñor Lefebvre.
Monseñor pidió también orar por
los sacerdotes. Hay muchos muy buenos sacerdotes en la FSSPX, no todo está
podrido. También mencionó no hostigar a estos buenos sacerdotes, explicando que
un sacerdote, por lo general, no le gusta recibir consejos de parte de los
fieles. El
debe hacer por sí mismo el planteamiento teológico. Nos ha dicho que podríamos hablarles una vez… una segunda
vez algunos meses después, pero no una tercera vez.
Monseñor insistió mucho en el hecho de comprender bien la situación mundial, y que lo que sucede en la Fraternidad es verdaderamente un « día de la marmota » de los años 1950, 60, 70 en la Iglesia oficial. La gran mayoría de los fieles quieren tener su misa dominical en una capilla confortable pero que está muy lejos de las bellas iglesias y catedrales de antes. Ellos no quieren luchar en contra del mundo moderno. Bajan los brazos lentamente, ya no se instruyen en su Fe haciendo concesiones al mundo moderno queriendo parecer normales. Monseñor nos ha recordado que debemos permanecer humildes. Si nosotros comprendemos lo que sucede en la FSSPX (la apostasía lenta), no es por nuestras propias fuerzas, sino por una gracia especial de Dios que nos ha permitido conservar la Fe y ver claro en esta crisis.
Durante su conferencia, Su Excelencia hizo un recuento
histórico de la Revolución y de la situación de la Iglesia desde la reforma
protestante del siglo XVI.
En su estilo particular que
conocemos bien, explicó cómo el protestantismo arrastró hacia la izquierda a
1/3 de la cristiandad, pero fue combatido eficazmente por el Concilio de Trento.
La Iglesia recuperó e incluso aumentó las almas perdidas por el protestantismo
por la evangelización de América y las misiones Jesuitas, entre otras cosas. Sin
contar todos los Santos y Mártires que la Contra-reforma engendró.
Después la Revolución francesa (liberalismo) arrastró
hacia la izquierda millones de almas de la Iglesia, superponiéndose al
protestantismo. Ella fue combatida eficazmente por una serie de grandes papas
en el siglo XIX. Las almas perdidas fueron recuperadas por la evangelización
del extremo oriente y de África dando así muchos Santos y Mártires a la
Iglesia.
El modernismo apareció a principios del siglo XX y fue
combatido por San Pio X… pero Monseñor puntualizó justamente, que las defensas
de la Iglesia van disminuyendo con cada herejía combatida :
El protestantismo: combatido por el Papa y todos los
obispos en el Concilio de Trento.
El liberalismo: combatido por
una serie de papas, de Pio VI a Leon XIII.
El modernismo: un solo Papa,
San Pio X.
El neo-modernismo del Vaticano
II: 2 obispos (Monseñor Lefebvre y Monseñor de Castro-Mayer).
El neo-modernismo de la FSSPX:
quizá solamente por sacerdotes…
Monseñor dijo que no cree en la fundación de un seminario. El piensa que será
muy difícil encontrar vocaciones en el mundo de hoy. Es difícil encontrar
jóvenes viriles que tengan al mismo tiempo la razón, el valor y la Fe. La
situación político-económica ha cambiado desde los años setenta. Ya no es fácil abrir escuelas, seminarios, etc. Habló
mucho de la dimensión doméstica de la Fe en los próximos años de persecusiones
que vendrán con seguridad próximamente con el nuevo orden mundial. Recordó a
los fieles que quizá estén sin sacerdotes en el futuro, cuando mucho tendrán
algunos domingos de cuando en cuando y que deben conservar la Fe por el rezo
del Rosario y las buenas lecturas. Monseñor dijo que los futuros sacerdotes
deberán ser formados como antes del Concilio de Trento, es decir,
individualmente por un sacerdote y no dentro de una estructura oficial.
Nosotros le preguntamos lo que todos en este foro querían
que preguntáramos:
¿Qué hay de Monseñor Tissier de
Mallerais y que piensa Monseñor Williamson?
La respuesta de Su Excelencia no les gustará :
Primero Monseñor alabó la
doctrina de Monseñor Tissier de Mallerais. Una doctrina clara y muy católica.
Elogió también su libro sobre la teología herética de Benedicto XVI. Aunque de difícil lectura,
nos alentó a leerlo.
Monseñor Williamson nos
mencionó que Monseñor Tissier le envió una carta después de su expulsión
preguntándose si Monseñor Lefebvre tomó una buena decisión al consagrarlo
obispo.
Video de la Conferencia de Monseñor Williamson: