miércoles, 2 de septiembre de 2015

UNA DE DOS: O FRANCISCO SE ESTÁ CONVIRTIENDO O MONS. FELLAY NOS ENGAÑÓ



DIJO MONS. FELLAY: Resolver antes lo doctrinal jamás sucederá porque en la Iglesia Militante siempre habrá problemas. Por eso hemos tomado una perspectiva más concreta, porque decir que tenemos derecho a atacar los errores significa que la autoridad está de acuerdo, significa una conversión. ¡Es muy claro! Significa que la cabeza no es liberal porque un liberal, modernista, un liberal no puede permitir que se ataque al liberalismo o al modernismo (min. 40:30). (conferencia exclusiva para los sacerdotes y de divulgación "prohibida sub gravi", dada en el seminario de Buenos Aires el 8-10-12)

DIJIMOS NOSOTROS: Falso: el liberalismo es contradictorio. ¿O acaso los liberales no promueven la libertad de expresión, según la cual cualquiera puede criticar a los liberales y al liberalismo? El liberal convencido se deja atacar en nombre de la diosa libertad. ¿No dijo Voltaire lo siguiente?: "No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defenderé con mi vida tu derecho a expresarlo". (entrada de 28-02-14) ...hemos dicho en varias ocasiones que el acuerdo de la FSSPX con Francisco es posible no a pesar del liberalismo de éste, sino precisamente por causa de tal liberalismo, porque un liberal cabal piensa que toda oposición o contradicción “es enriquecedora” (como suelen decir), que es algo que perfecciona o acrecienta la libertad. Mons. Fellay sostiene, en cambio, que un Papa que permita que se le critique, es un Papa convertido, un Papa que ha dejado de ser liberal... Ha reiterado esta idea muchas veces desde el 2012 y hemos visto cómo los demás acuerdistas hacen suyo el mismo falaz argumento, olvidando que el liberalismo es una ideología contradictoria, olvidando que los liberales promueven en todo el mundo el falso ideal de la "tolerancia" y esa forma de libertinaje llamada “libertad de expresión”, lo que hace posible atacar indistintamente a la verdad, a los defensores de ésta, al liberalismo, a los liberales, a quién sea y a lo que sea; olvidando que es perfectamente concebible que un Papa profundamente liberal -como Francisco-, un Papa extremadamente "tolerante", "abierto" y consecuente con esa falsa noción de libertad, acepte que una congregación que le está sometida lo critique a él, a sus enseñanzas y al liberalismo. (entrada de 14-08-14)