Antimodernisme:
esperamos que esta carta abierta redactada por un cofrade permita reventar un absceso
que emploma la tradición desde hace una decena de años…
Carta abierta al padre Lorans
Responsable del GREC y encargado de
las comunicaciones de la FSSPX
Estimado Padre y cofrade:
Solo su
honor y la credibilidad de su cargo me traen hacia usted. Tres meses después de
la entrega, el 14 de septiembre de 2011 por parte del Cardenal Levada a
Monseñor Fellay, de un documento con vistas a una solución canónica para la
Fraternidad, el Padre Michel Lelong hizo aparecer una obra titulada “Por la
necesaria reconciliación”. Este libro nos enseña que con la señora Huguette
Pérol, el Padre Dominico Olivier de La Brosse y el Padre Lelong (fundador del
Grupo de Amistad Islamo-Cristiano), usted, en 1997, con ocasión de una comida,
ha creado el GREC: El Grupo de Reflexión Entre Católicos.
El objetivo del GREC: « una verdadera
reconciliación”
Después de la primera sesión pública
de GREC, el 23 de mayo de 2000, las reuniones, "discretas y
amistosas", se hicieron cada vez más frecuentes, "aproximadamente una
vez por mes”. En 2004, se decidió invitar a estos encuentros a "un número
de participantes cada vez más grande que representaban las corrientes más
diversas de la Iglesia de Francia”. “En estas reuniones participaban - y
continúan participando - sacerdotes y laicos pertenecientes a la diócesis de
París y a las diócesis de provincia, a la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, a
la Fraternidad Sacerdotal San Pedro, al Instituto del Cristo-Rey y a otras
instituciones eclesiales". La preocupación del GREC es "contribuir a
la unidad de la Iglesia, en el respeto de las legítimas diferencias". Como
el señor Airiau dijo: "pueden existir católicos del rito griego, los
católicos de rito latino, pero también católicos del rito romano de 1969 y católicos
del rito romano de 1962”. Para la señora Huguette Perol, "el hecho de
conocerse lo cambia todo" y "las diferencias" entre
"tradicionalistas" y "conciliares" son comparables a las
diferencias "entre un napolitano" y "un holandés”. El propósito
del GREC es" mantener un diálogo entre las diferentes corrientes" de
modo que "la tradición" tenga "algo que decir en la Iglesia, cuando
recupere su lugar en ella”
Padre Lorans, ¿verdaderamente usted
comparte esta visión de las cosas? ¿No enseñó en el seminario o en el Instituto
que el liberalismo y el catolicismo son irreconciliables? ¿No sabe usted que el
acercamiento del católico al liberalismo es una traición, que el acercamiento
de un liberal al catolicismo es una conversión y que cualquiera que sea su
nombre, liberalismo católico o catolicismo liberal, conciliar a los dos es un
pecado?
« No nos equivoquemos,
no se trata de una diferencia entre Monseñor Lefebvre y el papa Paulo VI. Se
trata de una incompatibilidad radical entre la Iglesia Católica y la Iglesia
conciliar, la misa de Paulo VI representa el símbolo y el programa de la Iglesia conciliar” (Nota preliminar de
Monseñor Lefebvre, 12 de julio de 1976)
Padre Lorans, ¿ha informado de manera
suficiente a los cofundadores del GREC y al representante del papa, cuando lo « recibió
en la Nunciatura para un diálogo profundo” con la señora Pérol y el Padre
Lelong, de las decisiones de la Fraternidad?
« Los
contactos que la FSSPX tiene episódicamente con las autoridades romanas, tienen
como único objetivo ayudarlas a recuperar la Tradición y no la búsqueda de un
imposible “acuerdo” puramente práctico. El día en que la Tradición recupere
todos sus derechos, “el problema de la reconciliación no tendrá razón de ser…”»
(Mgr Lefebvre a Juan-Pablo II, Carta del 2 junio de 1988). » (Cor unum, n°85, octubre 2006)
El GREC y los contactos romanos
El 28 de
octubre de 1998, el padre Lelong le dirigió una carta al Cardenal Sodano
diciéndole:
“Numerosos
sacerdotes y fieles han sido conducidos a acercarse a la Fraternidad Sacerdotal
San Pio X no tanto por razones doctrinales, sino por apego a la Misa tridentina
(…) Con algunos amigos, hemos constituido en París un grupo de trabajo que se
esfuerza en preparar el día en que todos los “tradicionalistas” podrán
encontrar su lugar en la Iglesia en la obediencia al Santo Padre y bajo la
autoridad de nuestros obispos (…) me parece que el Jubileo del años 2000 podría
ser la ocasión de “proponer actos de reconciliación que serían para el honor de
la Iglesia”. Es en este espíritu, en una total fidelidad al Soberano Pontífice
y a las enseñanzas del concilio Vaticano II, que me permito, en nombre de
numerosos católicos franceses, pedirle señor Cardenal, si en un gesto de
caridad hacia nuestros hermanos, el Santo Padre podría levantar la excomunión
que fue pronunciada por las consagraciones irregulares de obispos realizadas
por Monseñor Lefebvre”
A este correo, el Cardenal Sodano
respondó el 20 de febrero de 1999:
« La cuestión que
usted plantea está muy presente en el corazón del Santo Padre, quien no cesa de
trabajar por la unidad de la Iglesia (…) Para ello, es importante que aquellos
que quieren regresar al seno de la Iglesia, manifiesten su deseo (…)”.
Padre Lorans, la apertura de las Basílicas
romanas durante la peregrinación de la Fraternidad a Roma en el año 2000, la
iniciativa misma de esta peregrinación y los contactos romanos que le
siguieron, ¿todo eso fue obra del GREC?
Un documento comprometedor
El 20 de octubre de 2008, una carta « firmada
por los responsables del GREC y por cierto número de personalidades católicas”
fue “enviada al Santo Padre”:
« He aquí que el Motu
Proprio de 2007 está creando poco a poco en la Iglesia, un verdadero “cambio en
la situación” en el seno de la cual la recepción positiva que le ha dado
Monseñor Fellay en nombre de la Fraternidad Sacerdotal San Pio X nos ha llenado
de esperanza (…) Convencido de expresar la esperanza de muchos católicos y esperando
que esto será para la Sociedad de San Pío X la oportunidad de regularizar su
situación canónica y de poder manifestar también su voluntad de entrar en plena
comunión con el Santo Padre, nosotros pedimos humildemente a Vuestra Santidad hacer todo lo posible para lograr el
levantamiento de la excomunión que pesa sobre los cuatro obispos consagrados
por Monseñor Lefebvre en 1988. En el contexto actual, creemos que este gesto de
Pastor común ayudará a suavizar las viejas heridas”.'
Padre Lorans, ¿esta carta del GREC
significa que usted renunció a ser miembro de la Fraternidad? Porque en el 2008
pidió usted una cosa que nuestro superior, en el 2006, dijo se negaría a hacer:
“evidentemente nosotros no vamos a pedir que nos levanten algo que no
reconocemos. Siempre nos hemos negado a reconocer la validez de estas
excomuniones, no podemos entonces pedir que se nos levante algo que no existe”.
(Monseñor Fellay, Sermón den Flavigny, 2 de febrero de 2006. DICI n° 130).
GREC y DICI: un mismo espíritu
El Padre Michel Lelong, cofundador
del GREC escribe:
"Hoy más que nunca, valoro
la importancia de los textos conciliares, en particular la Declaración Nostra
Aetate llamando a los católicos a conocer los valores de las principales
religiones; también conviene estar atentos al diálogo entre católicos como al
diálogo al que el Concilio Vaticano II nos llamó con los protestantes
ortodoxos, judíos, musulmanes, agnósticos y no creyentes; haría falta que sobre
el proceso hecho al Santo Padre por la Fraternidad Sacerdotal San Pío X a
partir de la expresión que de buena gana
utiliza - la " tradición viva ", por ejemplo - y sobre gestos
posiblemente discutibles, pero que no
comprometen su infalibilidad, se transforme en reserva lo que actualmente es
una condena. La Fraternidad San Pio X debe dejar de rechazar en bloque el Vaticano
II y sus admirables textos - por desgracia muy poco conocidos - que intentaron expresar
con palabras de hoy la presencia de la Iglesia en el mundo. Después del
Motu Proprio de julio de 2007, se puede esperar que el antiguo y el nuevo rito
no sólo coexistan, sino que se enriquezcan mutuamente, según lo deseado por
Benedicto XVI. Entonces, después de las desconsoladoras divisiones en torno al
altar entre "tradicionalistas" y "conciliares", la
Eucaristía verdaderamente será lo que es: el sacramento de la unidad y de la
caridad. . Como dijo Benedicto XVI al recibir en Roma en 2005 a los embajadores de los países musulmanes
ante la Santa Sede, debemos” reconocer con lealtad lo que nos separa y con alegría
y lo que nos une.'' '
Padre Lorans, ¿comparte usted estos
juicios y estas esperanzas ? ¿Piensa usted, como el padre Lelong, que para
llegar “sin tardanza a un acuerdo” es necesario “que la Fraternidad San Pio X
acepte las grandes orientaciones del Vaticano II interpretándolas como lo
propone hoy en día el Santo Padre”?
Padre Lorans, usted consiguió
convencer al Canónigo Jayr (Instituto de Cristo Rey) de participar en los
trabajos del GREC a pesar de todas sus “oposiciones”. ¿Esto fue porque usted
comparte los juicios de los padres Barthe (¿escritor?) y Ribeton (Fraternidad
San Pedro) que hablan de “liturgia extraordinaria”, de “doctrina extraordinaria”,
de una “pastoral extraordinaria”, de una “verdadera carga de almas de los
sacerdotes apegados a las pedagogías y modos “tradicionales” de la
santificación de las almas”?
Padre Lorans, ¿sus contactos con el
GREC serán los responsables del nuevo todo de DICI y de los órganos oficiales de
la Casa General? En internet, las intervenciones presuntuosas, aunque
deficientes, del señor Jacques-Régis du Cray (Ennemond, de Prévigny…) que desde
el 2007 no se ha “perdido la ocasión de asistir a las reuniones del GREC”, forman
parte de la Comunicación oficial de la FSSPX? ¿Cómo este joven hombre, tan
endeble en teología como altivo, hubiera
podido, sólo, aspirar a ejercer un papel de censor de la Tradición? Este
profesor de historia que diserta a tontas y a locas sobre el pretendido espíritu
de Monseñor Lefebvre, ¿no le permite usted, Padre Lorans, usted y la Casa
General, “preparar” las opiniones diciendo en voz alta lo que ustedes piensan
en voz baja? ¿Verdaderamente es de su propia iniciativa la mezquindad con que
se ensaña en denigrar a un obispo perseguido y excluido que tuvo la desgracia
de amar la verdad como debe ser?
Una antigua tentación
El
libro del Padre Lelong es prologado por Dom de Lesquen. Nos revela que el
sacerdote de la Fraternidad que más ha colaborado en los trabajos del GREC es
el padre Celier. Esto no se debe al azar. Interrogado por el padre Lelong, el
padre Auglanier hace esta triste confidencia: “Sabiendo el papel desempeñado por Dom Lesquen con Dom Gérard en su
unión del 8 de julio de 1988 con Roma, lo abordé y le hablé de una
normalización de la situación de la FSSPX con Roma. ¿No podríamos, con algunos
de nuestros amigos, organizar algunas reuniones? (…) Dom de Lesquen consintió a
esto”. Doce reuniones tuvieron lugar desde 1992 en Suresnes con « El
Padre Celier quien se avocó a estas conversaciones” hasta 1995 en la Escuela
Saint-Bernard en Courbevoie.
« De estos coloquios,
el Cardenal Ratzinger era informado regularmente por Dom de Lesquen » « Nuestros
interlocutores, precisa el padre Aulagnier, comprendieron así que la FSSPX
estaba lista para todo acuerdo, para todo arreglo, con tal de que la fe
católica le fuera asegurada para ella y para la Iglesia. Esto fue expresado
algunos años más tarde por el Padre Celier, en nombre de la FSSPX en su libro “Benedicto
XVI y los tradicionalistas”
Padre Lorans, ¿la Casa General le ha
encargado continuar la obra del Padre Aulagnier ? Y, con este fin, ¿quiso
ella que “el padre du Chalard no dejara de aportar al GREC un apoyo tan
discreto como atento” según la confesión del Padre Lelong? Cuando nuestro
superior nos dijo que “en la Fraternidad, estamos haciendo de los errores del
concilio súper-herejías, como un mal absoluto”, ¿fue bajo la influencia del
profesor de historia M. Airiau participante del GREC para quien el “Vaticano II”
no es “la abominación de la desolación en el lugar santo”? Padre Lorans, cuando
sus colegas “miembros del GREC” escribieron “a Monseñor Fellay el 20 de junio
de 2008”, que la FSSPX debería “retomar su lugar dentro de la Iglesia donde
tiene tanto que aportar, pero también tanto que recibir”, ¿hablaban de la
Iglesia conciliar o de la Iglesia Católica?
Padre Lorans, en vista de su cargo en
la Fraternidad, en vista de que « Monseñor Fellay » lo ha « designado
para seguir los trabajos del GREC », es de su interés y el de nuestra sociedad
religiosa que usted aclare a la brevedad posible, públicamente, los problemas provocados
por su participación en las actividades "discretas pero no secretas"
del GREC, cuya regla es "hablar sin
enfadarse de cosas que enfadan."
Padre Lorans, en esta hora en que la
comunicación de la Casa General sorprende, turba, desconcierta, inquieta,
escandaliza e indigna a más de un fiel y a más de un sacerdote, una aclaración
franca de su parte sin medias verdades, puede evitar que la situación se
deteriore irreversiblemente. Eso no debería ser muy difícil porque según usted:
« El GREC no busca un
compromiso hecho de verdades a medias o que se basen en lo no-dicho. Nuestra
mutua caridad no excluye la franqueza, al contrario, ella la exige”.
Con mi
devoción religiosa:
Un cofrade.