CONFERENCIA DEL P. PINAUD EN FRANCIA, 15 DE FEBRERO DE 2014
El Padre
Pinaud fue el Sacerdote que, como informamos puntualmente en este blog, estuvo recluido durante ocho meses en Jaidhof, Austria para luego ser juzgado
y condenado por haber corregido la ortografía de la “Carta
de los 37” Sacerdotes de Francia a Monseñor Fellay.
Ha dado una conferencia
en Francia el pasado 15 de febrero en la cual nos cuenta los detalles de su
juicio y hace importantes revelaciones.
Señoras,
Señores,
Es un
gusto saludarlos a todos y de volverlos
a encontrar a algunos de ustedes, es un honor igualmente estar en presencia de
fieles lúcidos y valientes.
En una conferencia que dio a
finales de enero, el Padre de Cacqueray pidió: “Que no sea subida a internet porque una conferencia oral no tiene la
precisión de un escrito y además hay circunstancias que no permiten tener una
luz completa sobre las cosas, por lo que las consideraciones no tienen un
aspecto definitivo que se tiene con la perspectiva”.
Yo no
quiero poner en duda la sinceridad de esta reserva, pero no puedo evitar el
preguntarme por qué lo que dijo a los fieles de Mantes-la-Jolie este 26 de
enero, no debía concernir más que a los fieles de esta capilla, pues les dio a
conocer informaciones muy interesantes respecto a los compromisos de Monseñor
Fellay –resultado de una muy larga conversación telefónica…
Es
preferible escuchar el audio de esta conferencia del Superior de Distrito que
leer el texto… las muy numerosas vacilaciones de una expresión siempre apoyada
con el condicional con muchos “si”, nos da verdaderamente la impresión que el
Padre de Cacqueray se esfuerza en convencerse él mismo de lo que dice, es
decir, que trata de mentirse a sí mismo o por lo menos tranquilizarse.
Yo no
quisiera apenarlo, pero después de todo lo que me dijo en el pasado, es
imposible no constatar una debilidad en él en la actualidad.
« Las
escamas que le cayeron en los ojos », para emplear su propia expresión,
comienzan a cubrirle la vista… me da la impresión de un ratón capturado por un
gato que se divierte con él…
En lo
personal, yo casi no frecuento internet, pero hay que decir que el internet es
un medio de preservarnos de una ignorancia que algunos quisieran imponernos.
El 21 de abril de 2012, en
Couloutre, el Padre de Cacqueray nos leyó confidencialmente, al Padre Schaeffer
y a mí, la carta de los tres obispo -¿cómo la obtuvo? yo no sabría decirles…
Pero no puedo ocultarles el alivio que sentí cuando me enteré que este
documento estaba disponible en internet.
Quien se atrevió a este acto, fue
acusado de falta grave en un
comunicado de la Casa General. Yo no sé si la Casa General está calificada para
llevar a cabo tal juicio. En todo caso, el Padre Schaeffer dijo gustoso: « ¡o
felix culpa!» ¡Feliz culpa!
Las
advertencias en contra de los sitios de internet parecen una invitación a la
ignorancia… y esto por parte de personas que utilizan el internet
abundantemente, sin exceptuar a los sacerdotes. Si hay riesgo y peligro en el
uso de internet, es más bien en los foros, porque en los foros cada quién puede
expresarse sobre cualquier cosa sin tener la competencia para tratar los temas
abordados –y dar a estas opiniones, a veces completamente falsas, una difusión
mundial.
Pero hay
que reconocer, en la situación que nos preocupa, la gran mayoría de los
documentos útiles, no hubieran sido accesibles si no es gracias a internet, y
felicito a las personas que consagran un tiempo razonable a la difusión de
documentos serios que nos aclaran nuestra situación.
Usemos
entonces este medio sin abusar de él y vayamos a buscar la información en donde
se encuentra, y utilicemos esta información con discernimiento.
Continúa...