lunes, 17 de febrero de 2014

HABLA EL P. PINAUD - PARTE 1

CONFERENCIA DEL P. PINAUD EN FRANCIA, 15 DE FEBRERO DE 2014



El Padre Pinaud fue el Sacerdote que, como informamos puntualmente en este blog, estuvo recluido durante ocho meses en Jaidhof, Austria para luego ser juzgado y condenado por haber corregido la ortografía de la “Carta de los 37” Sacerdotes de Francia a Monseñor Fellay.

Ha dado una conferencia en Francia el pasado 15 de febrero en la cual nos cuenta los detalles de su juicio y hace importantes revelaciones.
Debido a su extensión, la publicaremos por partes.

La Sapiniere
Señoras, Señores,
Es un gusto saludarlos a todos  y de volverlos a encontrar a algunos de ustedes, es un honor igualmente estar en presencia de fieles lúcidos y valientes.
En una conferencia que dio a finales de enero, el Padre de Cacqueray pidió: “Que no sea subida a internet porque una conferencia oral no tiene la precisión de un escrito y además hay circunstancias que no permiten tener una luz completa sobre las cosas, por lo que las consideraciones no tienen un aspecto definitivo que se tiene con la perspectiva”.

Yo no quiero poner en duda la sinceridad de esta reserva, pero no puedo evitar el preguntarme por qué lo que dijo a los fieles de Mantes-la-Jolie este 26 de enero, no debía concernir más que a los fieles de esta capilla, pues les dio a conocer informaciones muy interesantes respecto a los compromisos de Monseñor Fellay –resultado de una muy larga conversación telefónica…
Es preferible escuchar el audio de esta conferencia del Superior de Distrito que leer el texto… las muy numerosas vacilaciones de una expresión siempre apoyada con el condicional con muchos “si”, nos da verdaderamente la impresión que el Padre de Cacqueray se esfuerza en convencerse él mismo de lo que dice, es decir, que trata de mentirse a sí mismo o por lo menos tranquilizarse.
Yo no quisiera apenarlo, pero después de todo lo que me dijo en el pasado, es imposible no constatar una debilidad en él en la actualidad.
« Las escamas que le cayeron en los ojos », para emplear su propia expresión, comienzan a cubrirle la vista… me da la impresión de un ratón capturado por un gato que se divierte con él…
En lo personal, yo casi no frecuento internet, pero hay que decir que el internet es un medio de preservarnos de una ignorancia que algunos quisieran imponernos.
El 21 de abril de 2012, en Couloutre, el Padre de Cacqueray nos leyó confidencialmente, al Padre Schaeffer y a mí, la carta de los tres obispo -¿cómo la obtuvo? yo no sabría decirles… Pero no puedo ocultarles el alivio que sentí cuando me enteré que este documento estaba disponible en internet.

Quien se atrevió a este acto, fue acusado de falta grave en un comunicado de la Casa General. Yo no sé si la Casa General está calificada para llevar a cabo tal juicio. En todo caso, el Padre Schaeffer dijo gustoso: « ¡o felix culpa!» ¡Feliz culpa!

Las advertencias en contra de los sitios de internet parecen una invitación a la ignorancia… y esto por parte de personas que utilizan el internet abundantemente, sin exceptuar a los sacerdotes. Si hay riesgo y peligro en el uso de internet, es más bien en los foros, porque en los foros cada quién puede expresarse sobre cualquier cosa sin tener la competencia para tratar los temas abordados –y dar a estas opiniones, a veces completamente falsas, una difusión mundial.
Pero hay que reconocer, en la situación que nos preocupa, la gran mayoría de los documentos útiles, no hubieran sido accesibles si no es gracias a internet, y felicito a las personas que consagran un tiempo razonable a la difusión de documentos serios que nos aclaran nuestra situación.
Usemos entonces este medio sin abusar de él y vayamos a buscar la información en donde se encuentra, y utilicemos esta información con discernimiento.
Continúa...