sábado, 29 de septiembre de 2018

COMENTARIO ELEISON Número DLXXXV (585) - 29 de septiembre de 2018



Previsión Sueca

La previsión no tiene que ser costosa, si se hace hoy,
Pues si se hace mañana, podría ser oneroso.
“Si llega la crisis o la guerra” es el título de un folleto de 19 páginas dirigido a todos los hogares suecos en mayo de este año por el Estado de Suecia, “para ayudarnos a prepararnos mejor para cualquier cosa, desde accidentes graves, condiciones meteorológicas extremas o ataques de tecnología de la información, hasta conflictos militares… Mucha gente puede sentir ansiedad cuando se enfrenta a un mundo incierto…” Una página útil del folleto enumera de forma sensata las cuatro necesidades naturales más importantes de cualquier hogar en una emergencia nacional: agua, alimentos, calor e información.
Obviamente, el Estado de Suecia no es el único que observa un alto grado de tensión en el mundo que nos rodea. Todo Estado está formado únicamente por seres humanos, cada uno de los cuales viene de Dios y ha recibido la vida para hacer un uso correcto de ella y poder ir a Dios en el momento de la muerte. Sin embargo, la masa de la humanidad vive hoy en día en un estado de indiferencia hacia Dios, o en una rebelión positiva contra Él. Muchos hombres pueden no ser ateos, pueden creer todavía que Él existe, pero apenas lo toman en serio, porque la ciencia y la tecnología parecen haber tomado Su lugar, y es en adelante la política y la economía modernas las que garantizan para nosotros la buena vida. La vejez se traslada convenientemente a una residencia de ancianos y la muerte a un hospital. Sin embargo, Dios existe por supuesto tanto como siempre, Le importa más que nunca ver más almas que nunca arrojándose por el pecado al Infierno, y aquí está la razón por la cual nuestro mundo está en un estado de tensión sin precedentes: está viviendo voluntariamente en contraposición con su Creador. Una gran crisis debe estar por venir.
Puesto que el problema es radicalmente religioso, entonces no hace falta decir que la mejor solución es también religiosa. Ese hogar está contratando la mejor póliza de seguro para protegerse a sí mismo donde el Rosario es rezado regularmente por toda la familia reunida. ¡Cómo debe odiar el Diablo el Rosario! Pero mientras tanto, las sugerencias prácticas de Suecia son un buen comienzo para cualquier hogar que todavía no haya pensado en medidas naturales para prepararse para los problemas. Aquí hay algunas de ellas (para todas, ver en el Internet dinsäkerhet.se) –
AGUA – El agua potable limpia es vital. Se debe tener en cuenta un mínimo de tres litros por adulto y día. Prevea un medio para hervirla si es necesario. Tenga botellas, cubos con tapas, botellas de plástico para congelar el agua y bidones, idealmente con un grifo, para recolectar el agua.
ALIMENTOS – Tenga alimentos adicionales en casa que le proporcionen suficientes calorías. Utilice alimentos no perecederos que puedan prepararse rápidamente, que requieran poca agua o que puedan consumirse sin preparación: por ejemplo, pan con una larga vida útil, untables en envases, leche en polvo, aceite para cocinar, pastas, lentejas, latas de sardinas, ravioles, carne hervida, sopa, miel, nueces, semillas(estas son sólo algunas de las sugerencias del folleto).
CALOR – En una casa que se enfría sin electricidad, reúnanse en una habitación, cuelguen mantas sobre las ventanas, cubran el piso con alfombras y construyan una guarida debajo de una mesa para mantenerse calientes. Apague todas las velas y quemadores de aceite antes de dormirse. Airee la habitación regularmente para dejar pasar el oxígeno. Tener ropa de lana, colchonetas y sacos de dormir, encendedores, fuentes de calor alternativas, etc.
COMUNICACIONES – En una crisis habrá que poder recibir noticias nacionales, contactar con amigos y familiares, contactar con los servicios de emergencia. Por ello tenga un radio alimentado por baterías o celdas solares o de bobinas: un radio de coche y un cargador de teléfono móvil que funcione en un coche, baterías de repuesto, etc.
Y el folleto menciona algunos extras diversos como dinero en efectivo, un botiquín, combustible en el tanque. Muchas de estas cosas cuestan relativamente poco ahora, pero dejen que se avecine una crisis peligrosa, y se exponen de repente a volverse mucho más escasas y costosas, si es que se pueden tener en absoluto. “Confía en Dios”, dice el proverbio, “pero sigue remando hasta la orilla”.

Kyrie eleison.