miércoles, 25 de marzo de 2020

SANTA FIESTA DE LA ANUNCIACIÓN - ÚNASE AL ROSARIO DE LA FE POR LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA AL CORAZÓN INMACULADO DE MARÍA


En las actuales graves circunstancias, conviene reflexionar una vez más acerca del hecho de que los jerarcas de la Iglesia no han querido escuchar, hasta hoy, el urgente pedido de la Reina del Cielo sobre la consagración de Rusia a su Corazón Inmaculado.

Sabemos que la consagración de Rusia es el único remedio para los males que asolan a la Iglesia y al mundo: simplemente no existe otro. 

Queda poco tiempo. Si seguimos dilatando la obediencia al mandato del Cielo para la consagración de Rusia, tendremos que ser testigos de la anunciada "aniquilación de naciones” con esos sobrevivientes que “envidiarán a los muertos”. 

La obediencia al Mensaje de Fátima es nuestra única esperanza y la única solución a los grandes males actuales. Pero el tiempo se acaba. Debemos actuar ahora, y rápido, para que se dé cumplimiento al pedido de Nuestra Señora de Fátima.

Es por eso que hoy, en la fiesta de la Anunciación, volvemos a invitarlos al “Rosario de la Fe”, que es un último esfuerzo para suplicar al Cielo que se haga la consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María. 

Es verdad que somos muy pocos, pero, como sucedió en tiempos de Gedeón, es formando parte de una tropa humanamente insignificante aunque fiel a Dios, que vamos colaborar en el triunfo de Nuestra Señora contra el inmenso ejército de Satanás.

En estos días funestos ¿quiénes serán los 300 combatientes que, blandiendo el arma más poderosa que Dios nos ha dado, el Santo Rosario, librarán la batalla en la que la Madre de Dios aplastará la cabeza de la serpiente infernal, derrotando al mundo enemigo de Dios y a la apostasía de Roma, ? 

Que Cristo Rey nos dé la fuerza. Y que la Santísima Virgen, terrible como un ejército en orden de batalla, nos asista en las horas terribles que vienen.

El Rosario de la Fe se ha iniciado el 13 de febrero de este año y debe termina el 13 de octubre. Pueden inscribirse, si lo desean, en el sitio de los Cruzados, o pueden simplemente unirse a nosotros rezando su Rosario por la consagración de Rusia al Corazón Inmaculado.