¿“IGLESIA CONCILIAR”?
La expresión “iglesia
Conciliar” evidentemente expresa una realidad, algo real, a saber la masa de
personas y de instituciones que afirman ser Católicos pero que de hecho están
deslizándose en la práctica de la nueva religión humanista del Concilio
Vaticano II. “Deslizándose” porque el Conciliarismo o neo-modernismo está
precisamente programado para dar la posibilidad a los Católicos de mantener las
apariencias de la Fe mientras ellos vacían su sustancia. Los Católicos en lo
concreto pueden realizar este proceso tan rápidamente o tan lentamente como
ellos lo deseen, aún sin que sea necesario que lo lleven por todas las etapas
hasta su conclusión, pero el Conciliarismo en lo abstracto es totalmente
opuesto al Catolicismo y, llevado a su conclusión, destruye a la vez la Fe y la
Iglesia, tal como se esperaba que lo haga.
El proceso no es
difícil de observar ni de entender, pero los liberales que se encuentran a la
cabeza de la Fraternidad San Pío X, en su esfuerzo de reconciliarse con los
Conciliaristas de Roma, han hecho lo mejor que pudieron para confundir la
cuestión de la iglesia Conciliar y de la Iglesia católica. Por ejemplo, la
Iglesia católica es visible, dirán ellos, y la iglesia Conciliar es la iglesia
visible, luego la iglesia Conciliar es la Iglesia católica, argumento que fue
descartado hace años por Monseñor Lefebvre como siendo “infantil” (numerosas
son las iglesias visibles y no por eso son católicas). Igualmente infantil es
el argumento según el cual no existe más que una única Iglesia, de tal manera
que la iglesia Conciliar y la Iglesia católica deben ser una y la misma (hay
millares de falsas iglesias).
La verdad no es
demasiado complicada. La Iglesia católica es un organismo viviente, a la vez
divina y humana como su Fundador, Jesucristo. En cuanto divina, siendo Su
Esposa Inmaculada, no puede ser corrupta ni puede ser corrompida, pero in
cuanto está hecha de seres humanos pecadores, ella puede estar parcialmente
podrida tanto como cualquier otro organismo viviente. Así, una manera útil de
entender como la iglesia Conciliar se relaciona con la Iglesia católica es
pensar en una manzana podrida.
Por un lado, la parte
podrida pertenece a la manzana. Todo lo podrido fue alguna vez manzana. La
podredumbre es una corrupción de la manzana, un parásito sobre la manzana, no
podría existir sin la manzana y se mantiene firmemente adherida a la manzana a
menos que y hasta que la parte podrida caiga. De la misma manera, el
Conciliarismo pertenece a la Iglesia católica en tanto que todo lo Conciliar
fue alguna vez católico, se trata de una corrupción de la Iglesia católica, un
parásito sobre la Iglesia católica, no podría existir sin la Iglesia católica y
permanece firmemente adherido a alguna parte de la Iglesia católica a menos que
y hasta que ella destruye esta parte, tal como ella fue diseñada para hacerlo.
Por otro lado, la
podredumbre no pertenece a la manzana. Ninguna manzana fue creada con el fin de
ser una manzana podrida. Todo lo podrido es una transformación de alguna manzana,
una corrupción y un parásito de la manzana, transformándola para peor, cuyo
resultado es algo muy diferente de la manzana, algo que nadie en sus cabales
soñaría comer o decir que no es diferente de la manzana. De la misma manera, el
Conciliarismo no pertenece a la Iglesia católica, es una corrupción de algo
católico y es una parásito sobre sea lo que fuere es católico. El Conciliarismo
transforma (una parte humana de) la Iglesia católica para peor, cuyo resultado
es algo esencialmente no católico que ningún Católico en sus cabales llamaría
católico o con lo cual quisiera asociarse, bajo pena de perder su Fe.
Breve, el Conciliarismo
es podredumbre, y la “iglesia Conciliar” es la única Iglesia divino-humana que
está siendo podrida en uno u otro de sus aspectos humanos. Por supuesto la
Iglesia católica durará hasta el fin del mundo (Mt.XXVIII,20) mientras que la
“iglesia Conciliar” es simplemente una en medio de una larga lista de iglesias
parásitas a lo largo de las edades, viviendo de lo que ellas pudren y pudriendo
lo del cual viven. ¡Una plaga sobre todos los liberales confundidos y que
confunden!
Kyrie eleison.
La Iglesia es en parte de Dios y en parte del
hombre.
La parte humana puede ser podrida, no la
divina.