La Claridad de un Cardenal
Europa respondió una vez al amor de Dios.
¡Ahora debe sufrir a los migrantes, como su flagelo de Él!
¡Ahora debe sufrir a los migrantes, como su flagelo de Él!
Puede ser que en un libro o entrevista recientemente publicado por un
cardenal romano se pueda leer un sentido común inusual sobre las olas de
inmigración que durante décadas han estado amenazando con inundar las otrora
grandes naciones Occidentales. Pero el cardenal Sarah no es “racista” – viene
del África negra. ¡Ojalá los europeos apreciaran los dones de Dios a Europa
como lo hace él! Pero, ¿quién en Europa quiere a Dios? “Ay, ahí está el
obstáculo”, como dice Hamlet. El Cardenal:—
Estoy escandalizado por todos estos hombres que mueren en el mar, por el
tráfico de seres humanos, por la red de mafias, por la esclavitud organizada.
Estas personas emigran sin papeles, sin perspectivas de futuro, sin familia.
¿Creen que van a encontrar el paraíso en la tierra aquí? ¡No está en Occidente!
Si hay que ayudar a estas personas, mejor hacerlo en el lugar de donde vienen,
en sus propios pueblos, en medio de sus propias razas. Los desequilibrios
económicos y los dramas humanos no pueden justificarse. No se puede acoger a
los inmigrantes de todo el mundo. Acoger significa no sólo dejar entrar a estas
personas en el propio país, sino también darles trabajo. ¿Pueden hacer eso? No.
Significa darles un lugar donde vivir. ¿Pueden hacer eso? No. Estacionarlos en
alojamientos inadecuados, sin dignidad, sin trabajo, eso no es lo que yo llamo
acoger a la gente. ¡Es más bien algo organizado por la mafia! La Iglesia no
puede cooperar en la trata de seres humanos, que es más bien una nueva forma de
esclavitud.
Lo que encuentro igualmente escandaloso es usar la Palabra de Dios para
justificar todo eso. Dios no quiere que la gente emigre. El niño Cristo se
refugió en Egipto, a causa de Herodes, pero después regresó a casa. Dios
siempre traía a su pueblo de regreso a Israel, ya fuera por hambruna en casa o
por cautiverio en el extranjero. Un país es un gran tesoro, es donde nacimos,
donde están enterrados nuestros antepasados. Cuando se le da la bienvenida a
alguien, es para darle una vida mejor, no para meterlo en campamentos de
inmigración. Cuando uno es alimentado sin hacer ningún trabajo, no hay dignidad
allí.
¿Y qué cultura tienen ustedes para ofrecerles? ¿Son ustedes capaces de
compartir su cultura y sus raíces cristianas? Me temo que el desequilibrio
demográfico provocado por estas oleadas de inmigración hará que ustedes pierdan
su identidad junto con lo que les hace ser quienes son. Europa tiene una misión
especial que Dios le ha encomendado. Son ustedes, los europeos, los que nos
enseñaron el Evangelio y los valores de la familia, la dignidad personal y la
libertad. Si renuncian a su identidad, si se dejan inundar por pueblos que no
comparten su cultura, sus valores cristianos y su identidad corren el riesgo de
desaparecer. Como sucedió cuando la antigua Roma fue invadida por los bárbaros.
Hay que pensar: ¿las migraciones de hoy no son una nueva forma de esclavitud,
organizada para conseguir mano de obra barata? Toda esta gente que viene aquí
en busca de una forma de vida de ensueño. ¡Qué mentira! ¡Qué gran cinismo! El
Papa Benedicto XVI fue especialmente claro y profético en todas estas
cuestiones. [ . . . ]
Ustedes, los europeos, han sido moldeados por el cristianismo, todo en
Europa es cristiano. ¿Por qué negarlo? Ningún musulmán niega su identidad. Si
no vuelven a ser quienes son, desaparecerán. Y si Europa desaparece, se
producirá una terrible convulsión: El cristianismo correría el riesgo de
desaparecer de la faz de la tierra. Vean cómo están siendo invadidos por el
Islam: Los musulmanes quieren apoderarse del mundo y tienen los medios
financieros para hacerlo. No tendrán éxito porque el Señor está con nosotros
hasta el fin del mundo. Pero no deben negar quiénes son: los inmigrantes que
permiten entrar deben integrarse en su cultura, asumiendo que todavía tienen
una cultura. No los integrarán en su materialismo ateo. No quieren tener nada
que ver con eso.
Kyrie eleison.