martes, 26 de abril de 2016

OASIS DE JESÚS SACERDOTE: DEVORADO POR LA BESTIA CONCILIAR



En el 2007, el Monasterio Oasis de Jesús Sacerdote de Barcelona fue “Reconocido” por la Roma Conciliar. Entre las razones que en ese entonces dio el P. Muñoz, están las siguientes:
Aunque el  Oasis  es Pía Unión, nos falta la aprobación de los nuevos estatutos o constituciones de la vida contemplativa por la Jerarquía Eclesiástica. Las circunstancias han cambiado en la Iglesia y en el Oasis respecto a la Misa tridentina.  Antes, hace más de 30 años la Misa tridentina estaba prohibida en muchas partes, relegada e impedida. Por celebrar nosotros la Misa tridentina, nuestras Constituciones de vida contemplativa del Oasis quedaron “congeladas”. Hoy la Jerarquía Eclesiástica ha reconocido que nunca fue abolida, la fomenta y concede favorablemente. Son más de trescientos obispos los que ya la han celebrado. La Pía Unión nunca ha sido suprimida por el Arzobispo de Barcelona  con ningún decreto de extinción.  Por esa razón, el Oasis no ha de hacer un acuerdo con Roma, sólo pide el reconocimiento de su situación real. Roma ha concedido un privilegio a los que desean seguir la Tradición Católica, que es “Ecclesia  Dei”, donde en una evolución constatable se puede seguir cada día con más paz y tranquilidad la Misa tridentina y la Tradición. Actualmente se han acogido a este organismo más de 60 Institutos religiosos. Al Oasis no se le ha solicitado a cambio nada que comprometa su relación con la Tradición: ni acuerdos ni firmas….
Entre las ventajas del reconocimiento, el P. Muñoz señalaba:
Podemos continuar con la Misa tridentina sin ningún obstáculo o impedimento. Podemos seguir la Tradición como hasta ahora. Podemos seguir nuestra Constituciones, Costumbres y nuestro Espíritu.
En una entrevista al blog “Creer en México", el Padre Muñoz afirmó:
La palabra “acuerdo” con Roma no es correcto para nosotros. Un acuerdo supone un convenio o un pacto entre personas que han al ponerse de acuerdo firman un documento. Nosotros no hemos firmado nada para entrar en Eclesia Dei, ni nos han puesto condiciones de ninguna clase. Se trata de un “Reconocimiento” del Oasis, es decir de una “Aprobación” del Oasis y las Constituciones y nada más. El Oasis continuará viviendo como hasta ahora, es decir, fiel a la tradición y liturgia y Misa tridentina. Y todo esto que hasta ahora lo hacíamos al margen de la Jerarquía de la Iglesia, ahora lo haremos bajo su mirada y con su bendición.
Pues bien, esta es la situación después del “Reconocimiento” o “Aprobación” del Oasis “sin condiciones” , según nos informa un lector desde España:
Con ocasión de las bodas de oro del Oasis de Jesús Sacerdote, se celebró la misa dominical el 17-4-2016  por Monseñor Guido Pozzo, donde se aprobaron las nuevas Constituciones del Oasis con más de una decena de cambios.
En las nuevas constituciones se reconoce el Concilio Vaticano II y se acepta la nueva misa, ya se esperaba esto desde hace tiempo. 
También el título de Madre General desaparece y así el Oasis pasa a obedecer sólo a Roma. Ni siquiera el nuevo Oasis de Córdoba depende del Oasis de Barcelona: son independientes con su Madre de comunidad en cada uno de ellos.
Tampoco el Reverendo Padre Muñoz  puede decidir nada, ya en el Oasis todo tiene que ser consultado antes a Roma. 
Las religiosas están ya en manos de Roma, ellas en cambio parecen contentas porque dicen cosas como que hay que ver con ojos de fe todos los cambios que haga el Papa.
Es una pena que se quiera aparentar una cosa que no es: lo digo por el Oasis, ya que se puede leer algún artículo donde dicen que van a defender la  Tradición y no van a caer en el modernismo y dan pasos en silencio sin que mucha gente sepa nada.

Monseñor Pozzo en el Oasis.
Respecto a la visita de Mons. Pozzo, en este artículo se nos informa (extracto):
El pasado domingo 17 de abril en el Monasterio de la Inmaculada de la congregación del Oasis de Jesús Sacerdote en el municipio de Dosrius muy cerca de Mataró (Barcelona), con ocasión del 50 aniversario del mismo, se vivió una jornada memorable. Tras la aprobación de sus Constituciones definitivas, después de un periodo de rodaje de tres años “ad experimentum” de las mismas,  la Santa Sede quiso unirse de una forma muy especial al evento enviando al arzobispo Mons. Guido Pozzo, miembro y consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe y secretario de la Pontificia Comisión “Ecclesia Dei”, acompañado del dominico italiano P. Vincenzo Nuara. 
En su homilía, el arzobispo Guido Pozzo realizó una rápida consideración de los diversos males que afligen a nuestro mundo presente, advirtiendo de la tentación que supone querer solucionarlos prescindiendo de Dios. A este respecto, invitó a los fieles a poner su única esperanza en el Señor Resucitado y a acogerse a este tiempo de gracia que supone el “Año de la Misericordia”, proclamado por el Papa Francisco. 
Los nuevos fieles del Oasis.