lunes, 26 de noviembre de 2012

COMENTARIO DEL INFORME DE LA REUNIÓN DE PRIORES DE FRANCIA EL 9 DE NOVIEMBRE DE 2012.- POR FIELES DE LA FRATERNIDAD.


Una vez mas, a causa de la costumbre del secreto, nos vemos obligados a comentar un reporte que no hemos podido verificar. Sin embargo, no podemos pasar por alto estas informaciones, y si tiene errores, no dudamos que ciertos participantes de la reunión se apresurarán a rectificarlo.
El informe fue publicado aquí.





1er punto del informe:

Monseñor Fellay declaró : « El texto del Vaticano (el de la Comisión Ecclesia Dei del 27 de octubre de 2012) mencionando una carta del 6 de septiembre es un error de su parte. No ha habido otro correo de parte de la FSSPX que el de la declaración del capítulo de julio, que hace imposible un acuerdo tal como Roma lo desea”.
Por lo tanto esto significa que Monseñor Fellay niega haber enviado un correo a Roma después de mediados de julio de 2012. El último correo, dice él, es la declaración del capítulo acompañado de las seis condiciones. En su sermón del 1ero de noviembre, el nos da esta precisión: “Yo envié a Roma los documentos del Capítulo General, nuestra declaración final que es muy clara, y nuestras condiciones para eventualmente, cuando esto llegue, estar de acuerdo sobre un posible reconocimiento canónico”.

Leamos el comunicado ¿erróneo? del Vaticano :

“La Comisión Pontificia "Ecclesia Dei" anuncia que la Fraternidad sacerdotal de San Pío X en su última comunicación (6 de septiembre 2012), ha indicado que necesita un tiempo suplementario, de reflexión y de estudio, para preparar su respuesta a las últimas iniciativas de la Santa Sede”.
¿Es falso este texto? ¿Hay aquí error o mentira? Si sí lo hay, ¿por parte de quién, del Vaticano o de Monseñor Fellay? ¿Es importante o no saber la respuesta a estas preguntas?

Nos parece que es muy importante saber la respuesta, porque esta carta del 6 de septiembre, si acaso existe, hubiera sido escrita la víspera de la conferencia de Ecône en la cual Monseñor Fellay dijo que había sido engañado por Benedicto XVI, que ya no podíamos hacer nada bueno con el y que mientras viva este papa, probablemente no habría acuerdo. Entonces, evidentemente, si la víspera de estas declaraciones Monseñor Fellay escribió a Roma que quería todavía reflexionar para estudiar las proposiciones romanas y que le dieran un tiempo suplementario, el propósito que tuvo en la conferencia de Ecône no es  para nada creíble y parece como una comedia…

Parece una enormidad que el Vaticano hubiera podido cometer este error, no solamente por la fecha de la carta sino también por el contenido de la misma. El Vaticano hubiera entonces soñado una carta imaginaria pidiendo un tiempo de estudio y reflexión. Hubiera imaginado que la Fraternidad le pedía ese tiempo, mientras que Monseñor Fellay dice que no hubo nada. Entonces tendríamos un doble error del Vaticano: uno sobre la fecha del último correo y otro sobre el contenido imaginario que nunca existió: la solicitud de un aplazamiento. Nos parece imposible que un doble error de esa magnitud pueda haber sido cometido por profesionales que destinaron este comunicado al mundo entero. Para nosotros, por lo tanto, es una mentira.

Ahora examinemos de quién proviene esta mentira. ¿Del Vaticano o de Monseñor Fellay?


¿La mentira proviene del Vaticano ? Si proviene del Vaticano por ejemplo porque quisiera volver a empezar las discusiones, sería muy fácil para Monseñor Fellay publicar un comunicado oficial negando haber escrito una carta el 6 de septiembre, negando también haber solicitado un aplazamiento y diciendo que su respuesta es definitiva: El rechaza las proposiciones de Roma.

¿La mentira proviene de Monseñor Fellay ?

La razón sería fácil de encontrar: pedir un tiempo de reflexión suplementaria al Vaticano la víspera o el día que afirmó que todo estaba terminado con Benedicto XVI, probaría que lo que dijo en la reunión del 7 de septiembre en Ecône no es mas que un tejido de mentiras. Monseñor Fellay, para no ser acusado de haber actuado de mala fe por los miembros de la Fraternidad y encontrándose “arrinconado”, ha dicho una nueva mentira (que no hubo tal carta solamente la del Capítulo) para salvaguardar la credibilidad de sus mentiras en la reunión de Ecône.

En efecto, al final del Capítulo, el Vaticano pidió a Monseñor Fellay una toma de posición oficial:

Comunicado de la Sala de Prensa de la Santa Sede sobre la declaración del capítulo de la FSSPX el 19 de julio de 2012.

“El capítulo general de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, que ha concluido hace pocos días, ha dado a conocer una declaración acerca de la posible normalización canónica de la relación entre dicha Fraternidad y la Santa Sede. No obstante esa declaración se haya hecho pública, sigue siendo, ante todo, un documento interno, para el estudio y la discusión entre los miembros de la Fraternidad”. “La Santa Sede ha tomado nota de esta declaración pero sigue esperando la anunciada comunicación oficial por parte de la Fraternidad Sacerdotal para la continuación del diálogo entre la Fraternidad y la Comisión “Ecclesia Dei”.

Nos parecería muy extraño que Monseñor Fellay, tan respetuoso y obediente hacia las autoridades romanas, haya despreciado esta solicitud. Por lo tanto es probable que efectivamente haya escrito a Roma, además de haber enviado la Declaración del Capítulo y las seis condiciones, documentos que fueron enviados antes de la publicación oficial del 19 de julio de 2012 (recordemos el comunicado del 16 de julio de 2012: “El comunicado de la Casa General del 14 de julio de 2012 anuncia claramente que esta declaración será previamente enviada a Roma antes de ser hecha pública. Es el orden normal y no será derogado). Por lo tanto, Monseñor Fellay escribió a Roma entre el 14 y el 19 de julio de 2012. El 19 de julio, la Declaración del Capítulo fue publicada oficialmente y el mismo día Roma reclamaba una toma de posición oficial de la Fraternidad. Es más que probable que Monseñor Fellay haya escrito de nuevo “por obediencia” para pedir lo que reveló el comunicado de la Comisión Ecclesia Dei: Un plazo adicional de reflexión sobre la proposición romana del 13 de junio de 2012.

Si todo se hiciera por comunicados públicos, no nos haríamos todas estas preguntas y reinaría la confianza. Como este no es el caso y como todas las apariencias están contra él, nos vemos reducidos una vez mas a tener fuertes sospechas sobre la sinceridad de Monseñor Fellay. Que él publique entonces los comunicados oficiales precisos y sistemáticos, y se mejorará la comunicación.


« Monseñor Fellay ha renovado lo que dijo en Ecône el 7 de septiembre de 2012: Se equivocó en lo que concierne al Papa, el anuló su texto de abril que hizo polémica”.

Esta anulación oficiosa y repetida del Preámbulo doctrinal (todavía secreto) del 15 de abril de 2012 no nos asegura nada: por principio porque la anulación no ha sido publicada oficialmente. Estas palabras orales no tienen ningún valor porque los fieles no las han escuchado. No hay grabaciones publicadas. Las retractaciones hechas en secreto, lejos de reanimar nuestra confianza, no hacen mas que aumentar nuestra desconfianza. Monseñor Fellay sabía que algunos miembros del clero estaban tentados de seguir a los padres Pfeiffer, Chazal, Hewko y a Monseñor Williamson. Es muy cómodo hacerlos sentir tranquilos y calmar sus escrúpulos por algunas palabras orales sin valor, pero manteniendo a los fieles bajo la influencia de textos doctrinalmente falsos.
Declaraciones graves, doctrinalmente incorrectas fueron hechas públicamente. Una reparación pública debe ser realizada. Monseñor Fellay puede estar bien intencionado haciendo estas reuniones donde él se retracta, pero no podemos evitar pensar que si alguien quisiera destruir la Fraternidad, actuaría de esa misma manera. Mientras que la declaración doctrinal del 15 de abril no sea oficial y públicamente anulada, todavía tiene fuerza de ley, tenemos un documento grabado, la conferencia del Padre Pfluger a St Joseph des Carmes, el 5 de junio de 2012.
Además no es suficiente decir : “anulamos esta declaración”, porque los fieles y los sacerdotes podrían interpretarlo como: “es por razones diplomáticas que nosotros lo anulamos”. Por el momento, es de esta manera que Monseñor Fellay parece presentar esta retractación en la reunión del 9 de noviembre, porque él dijo que anulaba el texto que hizo “polémica”. No es porque un texto hace polémica que debe anularse. Monseñor Lefebvre también publicó numerosos textos que hicieron polémica pero que eran muy buenos. No. Este texto es un PREAMBULO DOCTRINAL: Se debe anular si es falso, se debe mantener si es verdadero. No se debe considerar en el plano diplomático, sino en el plano doctrinal.
Para anular este texto, habría que decir : pedimos perdón a los fieles por haber escrito estos errores doctrinales que tanto los han angustiado. Está claro que nosotros no podemos aceptar ni el Vaticano II ni el magisterio posterior a éste a la luz de la Tradición. El Vaticano II no ha “iluminado ciertos aspectos de la vida y de la doctrina de la Iglesia que estaban presentes en ella sin estar todavía formulados”, contrariamente a lo que dice la declaración. Me equivoqué en decirles que se tomaran lentes rosas para interpretar esta declaración doctrinal. Ella llevaba elementos falsos y ambiguos. Según las palabras de Nuestro Señor, esta declaración venía del demonio: “Que vuestro si, sea sí, que vuestro no sea no, todo lo demás viene del demonio”.

3er punto del informe:

« La expulsión de Monseñor Williamson no tiene nada que ver con una exigencia de Roma. Ha habido dificultades con él desde hace mucho tiempo, como por ejemplo su apoyo al IBP o a la prohibición de su blog”

Esto podría ser cierto o falso. Pero sí sabemos que esta expulsión ha sido saludada como una “buena noticia” por el Vaticano y como “una decisión que facilitará las discusiones con Roma” por el padre Andreas Steiner en Alemania.

Recordemos que el Vaticano en febrero del 2009 en la persona de el cardenal Tarcisio Bertone, intervino para pedir a Monseñor Williamson de « tomar sin equívoco y públicamente sus distancias con estas declaraciones sobre la Shoah antes de ser admitido a las funciones episcopales en la Iglesia católica”. Recordemos igualmente que el 16 de mayo pasado, la Comisión Ecclesia Dei en un comunicado de prensa anunció que “la situación de los otros tres obispos de la Fraternidad será tratada separada e individualmente”.
Notemos que Monseñor Williamson es el único de los cuatro obispos que se opuso clara y oficialmente a la Declaración del Capítulo y a las seis condiciones: nos parece que es por eso que está perseguido.
En relación al presunto apoyo de Monseñor Williamson al IBP, esto es lo que dijo Monseñor Williamson en su sermón del 17 de octubre de 2004 (el IBP fue fundado en el 2006, por lo que en el 2004 Monseñor Williamson no podía apoyar un instituto que todavía no existía).  Sabemos que no hubo otro apoyo de Monseñor Williamson al padre Laguerie mas que esta declaración bastante moderada hecha en el 2004:

« Siempre puedo equivocarme  (…) he tenido el tiempo de familiarizarme con ciertos aspectos de esta crisis que amenaza la Fraternidad y es por eso que hablo, si fuera una pequeña cosa no hablaría. Pero sí es algo (…) Y si la autoridad y la obediencia están separadas o se desvían de la verdad, tenemos un problema que no se arreglará solamente con la obediencia y la autoridad.

La naturaleza de la Fraternidad es como un bote salvavidas; un bote salvavidas es vulnerable. (…) Y queridos amigos, si ustedes y yo hacemos volcar a la FSSPX por nuestras acciones, por nuestras guerras, nuestras querellas siempre bajo la apariencia de bien… entonces si nos batimos en el nombre de una buena causa, si nos batimos, supongamos, contra el Jansenismo o la tendencia Jansenisante (…) Entonces esta vez los pasajeros a bordo de la canoa pueden decir muy bien: “La justicia exige esto, me niegan mis derechos, no puede ser cuestión solamente de obediencia” – tiene razón, tiene razón, por eso se hace volcar la canoa, de suerte que todos mueran en las aguas heladas. (…) Entonces bien, por parte de los pasajeros hay que saber controlarse y no partir a la guerra incluso si el capitán se equivoca porque se corre el riesgo de la propia vida y la de todos los pasajeros en el bote. Entonces para los pasajeros que no se desencadenen, que sepan controlarse. (…) Si las autoridades van a comprender--- ¿qué deben comprender las autoridades? Que es una cuestión de la verdad, que hay una cuestión de falsa espiritualidad y que esta cuestión de fondo no se arreglará con la obediencia y la autoridad.
En una situación normal el capitán puede hacer lo que quiera porque siempre habrá una instancia sobre él, en la gran estructura de la Iglesia para salvar  a la víctima de la arbitrariedad del capitán. (…) Pero en el bote salvavidas no se puede hacer eso: es diferente. Entonces fingir que en el bote salvavidas todo es como en una congregación ordinaria en tiempos ordinarios de la Iglesia, es hacerse ilusiones de la realidad.
 Entonces que las autoridades vayan con cuidado como San Pedro (…) y que los pasajeros vayan también con cuidado…

Expulsar a este obispo por una reflexión que hizo en un sermón hace ocho años, antes de la creación del IBP no es plausible. Su “apoyo al IBP” por lo tanto, no es la verdadera razón de esta expulsión.
Cuando Monseñor Fellay habla del blog de Monseñor Williamson, sabemos que desde hace más de un año, Monseñor Williamson cerró su blog por orden terminante del Superior General. Solamente mantuvo una carta privada que enviaba a los suscriptores por internet. ¿Monseñor Fellay confunde el antiguo blog con la carta privada Comentarios Eleison? Porque son dos cosas diferentes…

4to punto del informe :

Después de la reunión con Monseñor Fellay, ciertos sacerdotes hicieron preguntas : “Sacerdote N° 1: pide que se produzca un documento doctrinal explícito por parte de Menzingen, como lo hacía Monseñor Lefebvre, haciendo hincapié contra el Vaticano II, la nueva misa y el magisterio actual. Respuesta de Monseñor Fellay: un texto se está preparando. (Pero quiere que sea diplomático)”

Comentario :


Mientras que Monseñor Fellay busca hacer diplomacia, la Fraternidad será dividida y no tendremos confianza. Nosotros no necesitamos diplomáticos, sino apóstoles que prediquen la verdad claramente, a tiempo y a destiempo. San Juan Bautista ¿fue  diplomático con los fariseos cuando los trató como “raza de víboras”? y Nuestro Señor, cuando los llamó “sepulcros blanqueados”? San Pio X, en Pascendi dijo que los modernistas tratan de destruir la Iglesia con un arte “soberanemente pérfido”… En cuanto a Monseñor  Lefebvre, él dijo que el cardenal Ratzinger era un “herético”. ¡La diplomacia de estas personas no es su fuerte! ¡Y entre ellas, contamos a dos santos canonizados y el Verbo Encarnado!

Nosotros no queremos diplomacia. Queremos la verdad, afirmada claramente en frases no ambiguas, porque “todo lo demás viene del demonio”.

Otra cosa nos choca, porque muestra una negligencia grave frente a las almas: desde el 5 de junio de 2012, los fieles de la Fraternidad están bajo la influencia de un texto gravemente erróneo, el Preámbulo Doctrinal del 15 de abril revelado en parte por el padre Pfluger. Monseñor Fellay no corrige  nada oficialmente ¡mientras que las almas son puestas en grave peligro por este texto! ¡Hace ya 5 meses y medio! ¿Por qué no se ha puesto a corregir este texto, si piensa que era malo? Respuesta evidente: porque no lo encuentra malo, simplemente.

5to punto del informe:

« Sacerdote N°2 : pide la reparación de la « confianza rota ». Responde Monseñor Fellay: él está consiente y ha dicho que tomará tiempo.”

Preguntas : ¿Monseñor Fellay piensa verdaderamente que la prohibición de recibir los sacramentos que golpea en los Estados Unidos a ciertos fieles hostiles a los acuerdos prácticos, la expulsión de Monseñor Williamson y ahora la del Padre Hewko, piensa verdaderamente que todos sus actos, que están lejos de ser anodinos para el futuro, van a regresar la confianza de los sacerdotes fieles? ¿Piensa él verdaderamente que sus sermones recientes en donde destila una nueva visión de la Iglesia opuesta a la que tenía Monseñor Lefebvre van a regresar la confianza? ¿Piensa él verdaderamente que mantener las seis condiciones decididas por la mayoría del Capítulo es de tal naturaleza que pueda tranquilizar a los fieles?
Desgraciadamente, podría ser que le regrese la confianza a aquellos que quieren dejarse burlar otra vez y que también duerma a la mayor parte del pequeño rebaño.

La nueva dirección doctrinal impresa en la Fraternidad, va a cambiar las mentalidades sin que se den cuenta, y cuando el fruto esté maduro, Roma no tendrá mas que recogerlo. Como dijo el GREC  (del cual el Padre Lorans es miembro fundador) en una carta del 20 de octubre de 2008 enviada al Santo Padre para pedir “el levantamiento de las excomuniones que pesan sobre los cuatro obispos consagrados por Monseñor Lefebvre en 1988”: “Pensamos que el levantamiento de las excomuniones pondría en marcha  un proceso inevitable de acercamiento con vistas a realizar  acuerdos entre la Santa Sede y la FSSPX, o al menos acuerdos con una gran parte de sacerdotes y fieles de la FSSPX” (cf: Por una necesaria reconciliación, Padre Lelong, pág. 52, ediciones:NEL)

Si, el proceso INEVITABLE ha sido lanzado y avanza con vistas a realizar acuerdos entre la Santa Sede y la FSSPX, o al menos acuerdos con una gran parte de sacerdotes y fieles de la FSSPX”. Y nosotros sabemos con certeza que con esos acuerdos llegará la muerte de la Fraternidad que se liberalizará, como el Padre Laguérie se ha liberalizado finalmente (él nos ha dado la prueba en su última entrevista a Monde&Vie del 20 de octubre de 2012), y como Monseñor Fellay se ha liberalizado, incluso antes de haberse juntado con Roma (El nos ha dado la prueba entre otras por la cita del preámbulo doctrinal del 15 de abril de 2012, revelado en St. Jospeph des Carmes el 15 de junio por el Padre Pfluger).