DAÑO INCESANTE – I
Cuando las personas desean
defender a la muy mala Declaración Doctrinal (DD) oficialmente sometida a las
autoridades Romanas por la Fraternidad San Pío X a mediados de Abril del año
pasado como fundamento para un acuerdo práctico entre Roma y la FSPX, a menudo
argumentarán que, debido a que Roma rechazó la DD, la DD no interesa más y
puede ser olvidada. Pero, en el número de este mes del “Recusant”, revista de
la Resistencia recientemente aparecida en Inglaterra, hay un argumento
contrario que merece cuidada atención. Helo aquí, sea citado directamente del
original, sea resumido:--
“La DD, tal como ambos su
nombre y su contenido dejan en claro, es una declaración estableciendo que un
número de posiciones doctrinales en cuestiones de la mayor importancia en la
presente crisis en la Iglesia, son aceptables para la FSPX. El problema es que
varias de estas posiciones expresadas en la DD no son aceptables”. Por ejemplo,
al Capítulo General de Julio pasado le fue dicho por un líder teólogo que “Esta
Declaración es (...) profundamente ambigua y peca por omisión contra el deber
de denunciar claramente los errores principales que todavía continúan con pleno
vigor dentro de la Iglesia y que están destruyendo la Fe de los Católicos. Tal
como está escrita, esta Declaración da la impresión que nosotros aceptaríamos
la ‘hermenéutica de la continuidad’”.
“El daño ocasionado por la DD
es por consiguiente uno (el?) de una declaración pública doctrinalmente dudosa.
Tampoco ha sido, como tal, “retirada” o “renunciada”. De hecho, Mons. Fellay
sistemáticamente rechaza admitir que haya algo doctrinalmente dudoso en su
Declaración. Como mucho, él admite haber tratado de ser “demasiado sutil”, pero
él no admite que tal sutileza sea altamente censurable en cuestiones referentes
a la defensa de la Fe. Mons. Fellay se queja de que todo el problema radica en
que “él no ha sido apropiadamente interpretado”, incluso por miembros de la
FSPX teológicamente muy calificados. El permite que, entre otros, el P. Themann
en Estados Unidos defienda la Declaración en conferencias públicas que han sido
grabadas y están siendo distribuidas entre los fieles”.
Es cierto que las cosas podrían
haber sido peor si Roma hubiera aceptado la DD, pero ello no quita el daño
persistente causada por la manifestación de la DD en cuanto a lo que es
doctrinalmente aceptable para la FSPX. Porque si Mons. Fellay dice que él
“retira” y “renuncia” a la DD, lo más probable es que él quiera decir tan solo
que ella era inoportuna en ese momento puesto que estaba sujeta a causar
división en la FSPX. “El nunca ha ni siquiera sugerido, que la DD sea doctrinalmente
dudosa e inaceptable. Y es allí donde ha radicado desde el inicio la cuestión
real, y esa es la cuestión que está muy lejos de ser resuelta: el Superior
General parece negarse a emitir una profesión sin ambigüedades de la posición
de la FSPX”.
En conclusión, el escándalo
causado por la DD no ha sido aún reparado. “Tratar de restar importancia a la
seriedad del asunto con el propósito de mantener o recobrar la paz y el sosiego
entre los fieles arriesga favorecer la actitud de que la doctrina no importa
tanto, después de todo, siempre y cuando las cosas funcionen tranquilamente y
podamos mantener la Misa de siempre, etc..” Restarle tal importancia a la DD
solamente empeorará el escándalo (Fin del artículo en el “Recusant”).
Este artículo expone muy moderadamente
el problema que plantea la DD al no ser desmentida o retractada públicamente
por el Obispo Fellay. Pero, ¿cómo puede cualquier Congregación Católica
mantener y servir a la Verdad estando dirigida por un Superior que tan
obstinadamente juega a las bolitas con la Verdad? Si la FSPX es un bote
salvavidas, o bien se deshace de su iluso Capitán que constantemente busca
taladrar agujeros en el piso del bote salvavidas, o bien la FSPX se convierte
en un bote quitavidas. Que Dios en su misericordia abra los ojos de la FSPX.
Kyrie eleison.