PÁGINAS

viernes, 22 de marzo de 2013

EL DOBLE DISCURSO DE MONSEÑOR FELLAY





Mientras Monseñor Fellay dice una cosa al Vaticano en su declaración de abril, otros documentos oficiales de la FSSPX dicen exactamente lo contrario. Si proceder con doblez es absolutamente inaceptable en los verdaderos católicos, mayormente en un Obispo; quizá todavía peor sea la ceguera voluntaria de muchos de nuestros colegas Sacerdotes, puestos por Dios al frente de las ovejas para guiarlas y defenderlas; ceguera que se traduce en una indebida tolerancia respecto del carácter doble y ambiguo del nuevo estilo impuesto por el Superior General a la congregación. Parece increíble que muchos de ellos sigan diciendo, contra la evidencia palmaria: “no se firmó el acuerdo y por eso nada ha cambiado en la FSSPX. No existe ninguna crisis interna, como quieren hacernos creer los perversos administradores de algunos sitios de internet dedicados a la difusión de rumores”.  

Dos ejemplos de este doble discurso:


A)  DOBLE DISCURSO ACERCA DE LA VALIDEZ DE LA MISA:

Dice Mons. Fellay a Roma en su declaración doctrinal de 15 de abril de 2012:

7  Nosotros declaramos reconocer la validez del sacrificio de la Misa y de los Sacramentos celebrados con la intención de hacer lo que hace la Iglesia según los ritos indicados en las ediciones típicas del Misal romano y de los Rituales de los Sacramentos legítimamente promulgados por los papas Paulo VI y Juan Pablo II.

Dice la FSSPX:

La validez de la Nueva Misa

Siendo esto así, ¿debemos decir que la Nueva Misa es inválida? Esto no ha sido demostrado, pero puede argüirse lo siguiente: por un lado, la Nueva Misa no está cualificada como rito católico; por otro, el celebrante debe querer hacer lo que hace la Iglesia; ahora bien, la Nueva Misa ya no garantiza por sí misma que tiene esa intención, la cual dependerá de su fe personal (generalmente desconocida para los presentes, pero más o menos dudosa a medida que avanza la crisis en la Iglesia). Por tanto, puede presumirse que estas misas son de validez dudosa, y más aún con el paso del tiempo.
Las palabras de la consagración, especialmente del vino, han sido falsificadas. ¿Se ha respetado «la sustancia de los sacramentos» (…)? Este problema todavía es mayor en las misas celebradas en lengua vernácula, donde pro multis [por muchos] ha sido mal traducido como por todos los hombres. Algunos arguyen que éste hecho tiene tal importancia que invalida estas Misas; muchos lo niegan. Pero esto acrecienta la duda[1].

B)   DOBLE DISCURSO ACERCA DEL CÓDIGO DE DERECHO CANÓNICO:

Dice Mons. Fellay a Roma en su declaración doctrinal de 15 de abril de 2012:

8  Siguiendo los criterios enunciados aquí arriba (III, 5), así como el canon 21 del Código, nosotros prometemos respetar la disciplina común de la Iglesia y las leyes eclesiásticas, especialmente aquellas que están contenidas en el Código de derecho canónico promulgado por el papa Juan Pablo II (1983) y en el código de derecho canónico de las Iglesias orientales promulgado por el mismo Pontífice (1990), quedando a salvo la disciplina que se le conceda a la Fraternidad Sacerdotal San Pio X por una ley particular.


Dice la FSSPX:

¿DEBEMOS ACEPTAR EL NUEVO CÓDIGO DE DERECHO CANÓNICO?

Un código es una colección de leyes, siendo cada una de ellas una orden de la autoridad competente: cada canon del Código de 1917 era una ley de Benedicto XV, y cada canon el Código de 1983 (comúnmente llamado ahora "nuevo código") es una ley de Juan Pablo II.
Ahora bien, para el Papa Juan Pablo II, la finalidad del nuevo Código es expresar la nueva eclesiología del Concilio Vaticano II (esto es, la nueva comprensión que tiene la Iglesia sobre su naturaleza y misión) en lenguaje canónico, y debe entenderse siempre a la luz de las enseñanzas conciliares. Pero ese Concilio alteró la enseñanza católica. Por tanto, debemos sospechar que la nueva legislación codifica los mismos errores, y estar preparados para no aceptar toda sus "leyes" (…), sino sólo aquellas que de forma evidente no comprometan la enseñanza católica sobre fe y moral.
(…)
Todo lo cual nos lleva a concluir: «la Hermandad de San Pío X manifiesta su profundo desacuerdo con la letra y el espíritu de este nuevo Código, que engloba las opiniones conciliares sobre la Iglesia y el mundo».[2]

Un sacerdote de la FSSPX



[1] “Breviario sobre la FSSPX”, publicado en el sitio oficial español de la FSSPX:  http://tradicioncatolica.es/fsspx/breviario-sobre-la-hermandad-de-san-pio-x-fsspx/

[2] Idem nota 1.